miércoles, 12 de marzo de 2014

Psicomotricidad su relación con la Reeducación Gráfica.





Psicomotricidad

"Históricamente, desde 1900 a la fecha, el recorrido y la evolución del campo psicomotor. se despliega desde nuestro punto de vista, de acuerdo con diferentes cortes que van modificando y delineando un accionar clínico específico.

Primer corte epistemológico:
Encontramos en primer término,las prácticas reeducativas determinadas por el concepto del paralelismo mental-motor.Primer corte espistemológico que intenta superar el dualismo cartesiano a través de esta relación y correspondencia.
En esta primer etapa la influencia de la neuropsiquiatría es determinante en una clínica que se centra en lo motor y en un cuerpo insrumental. herrmienta de trabajo para el reeducador, que se propone arreglarlo.

Segundo corte epistemológico:
En segundo término, con los nuevos apotes del ámbito psicológico, en especial de la psicología genética, ubicamos un pasaje de lo motor al cuerpo, en donde este se transforma en un instrumento de construcción de la inteligencia humana.Segundo corte epistemológico donde el acento pasa de lo motor al cuerpo como productor en su acción de la vida intelectiva. La mirada estará puesta no ya en lo motor sino en un cuerpo en movimiento.
Entonces, ya no se trata de una reeducación, sino de una terapia psicomotriz, que se ocupa, observa y opera en un cuerpo en movimiento, que se desplaza, que construye la realidad, que conoce a medida que comienza a moverse, que siente, se emociona, y esta emoción se manifisesta tónicamente.
Así, el tono muscular, las posturas, el gesto, la emoción ( representante del orden de lo psíquico en el cuerpo)  serían producciones del cuerpo que se podrían abordar en un encuadre terapéutic psicomotor.
Este encuadre y  enfoque "global" del cuerpo de la persona estaría determinado por tres dimensiones en las que el psicomotricista centrará su mirada: una dimensión instrumental, una dimensión cognitiva y otra dimensió tónico- emocional.

Tercer corte epistemológico:
En tercer término, con el aporte de la teoría psicoanalítica, surge un giro conceptual fundamental (...) ya no centra su mirada en un cuerpo en movimiento, sino en un Sujeto con su cuerpo en movimiento.
ya no se tratará de una "globalidad", de una " totalidad", sino de un sujeto dividido, escindido, con un cuerpo real, imaginario y simbólico: este tercer corte espistemológico fundaría una clínica psicomotriz centrada en el cuerpo de un sujeto deseante y no ya, en una terapeútica basada en objetivos y técnicas.
Así la inclusión de lo inconsiente en el ámbito psicomotor por sus consecuencias teórico-clínicas sub-vierte su mirada, diferenciándose claramente de las relaciones terapéuticas empáticas o destinadas a la exresión o a la catarsis emocional (...)  que, aunque intentan tomar en conisderación conceptos del psicoanálisis como la transferencia , regresión, sublimación, et, desde la mirada que proponemos, vacían y desvirtúan al carácter que el psicoanálisis dio a los mismos, perdiéndose así la posibilidad de que se articulen con la práctica psicomotriz. (...)

Resumiendo: a lo largo de la historia del ámbito psicomotor se pueden precisar diferentes pasajes: de lo motor al cuerpo. No son sinónimos, ni tampoco equivalentes y es, justamente, porque tampoco son desanudables que la psicomotricidad es nombrada y por ende, existe."


Levin, Esteban: La clínica psicomotriz. "El cuerpo en el lenguaje ".Nueva Visión. Buenos Aires. 2011. Págs.28-29