miércoles, 26 de diciembre de 2012

Enfermedades escondidas en la escritura



Adaptación del texto original por Eva Procopio

 

Grafología: enfermedades escondidas en la escritura


Es útil en el ámbito empresarial, pedagógico y forense, pero también es capaz de revelar dolencias del sistema nervioso, daños neurológicos, trastornos alimenticios o problemas del aparato digestivo, entre otras

Más allá de los gestos, de las miradas que delatan quienes somos, cómo nos encontramos y qué intenciones tenemos, la escritura se observa como la herramienta más infalible, pues es en ella donde se refugia y expresa lo más profundo del ser.
Tanto es así, que refleja (no diagnostica en sentido estricto) incluso enfermedades: dolencias del aparato digestivo, trastornos alimenticios como la bulimia y la anorexia, conductas adictivas como el alcoholismo, síntomas de deterioro del sistema nervioso y daño neurológico, entre otras. «En Estados Unidos han perfeccionado mucho esta especialización. La grafología puede ser un elemento importante para detectar enfermedades o estados patológicos», dice María Teresa Graells, profesora de Global Human Capital Group
(http://www.ghcg.es/index.php?option=com_content&view=article&id=356&Itemid=162&lang=es).
Dirección, forma, inclinación, orden, presión, situación, velocidad... «Cada signo gráfico nos revela una información», añade Graells.
Manuel J. Moreno, presidente del Instituto de Grafología Analítica y profesor de la Universidad Autónoma de Barcelona, destaca que «hay signos grafológicos que tradicionalmente se han relacionado con determinadas dolencias, como el asma o los problemas cardiopáticos.(…)
(…)Se ven alteradas la tensión y el ritmo escritural». Unos rasgos denominados por los expertos «arritmias gráficas».
En cuanto al daño neurológico (…) El experto explica que en líneas generales, «cuando un individuo está enfermo y la dolencia le está debilitando, la presión con la que escribe se resiente, el trazado suele ser más flojo y pueden aparecer temblores».

Psicosomáticas
Por su parte, Alberto Martínez, director de Formación Grafología (www.formaciongrafologia.com/cursos), considera que «existen muchas enfermedades psicosomáticas y muchas de ellas tienen reflejo en la grafía». Un ejemplo de cómo se plasma una escritura en un trastorno es la bulimia.
«Si el afectado padece este problema desde hace mucho tiempo, y alguna zona del cuerpo se ha visto resentida, como puede ser el esófago o la faringe, esto queda patente en el papel. Aunque nunca será sinónimo de diagnóstico», resalta el experto. Algo en lo que coincide Moreno: «Expresan las razones psicológicas que están detrás de la anorexia o la bulimia, pero no es una certeza absoluta».
Uno de los puntos fuertes de esta técnica proyectiva se centra en los más pequeños. Martínez destaca que tiene grandes aplicaciones, ya que «si al poco tiempo que suelen tener los padres se suma que a los adolescentes les cuesta comunicarse, tenemos clara la necesidad de esta herramienta no invasiva para enterarnos de qué está pasando. Y estas situaciones quedan reflejadas no sólo en su escritura, sino que cuando se trata de niños también podemos analizar sus dibujos, lo que permite orientar sobre el posible origen del problema. Es un auxilio impresionante». También resulta de utilidad para aquellos que presentan un cuadro de Asperger o síntomas autistas. (…)
Teresa Graells añade que «para los niños y jóvenes también se utiliza la llamada [2]grafoterapia en su etapa escolar para obtener mejor rendimiento de su atención, comprensión verbal, tenacidad y comunicación».
Asimismo, es un punto de apoyo importante en los trastornos límite de la personalidad, ya que se pueden detectar problemas gracias a la [3]caligrafía. «Se ve si la persona tiene dificultades con algún progenitor o una tendencia a la impulsividad en ciertas áreas. Ayuda a plantear hipótesis sobre las que trabajara psicólogos y terapeutas», comenta Alberto Martínez.

La firma
Muchos se preguntan si cambiar la firma, o simplemente si se «deforma» nuestra caligrafía, puede tener algún significado. Los especialistas aclaran, en primer lugar, que hay que distinguir la firma de la escritura de un texto. La primera «es una pequeña biografía de cómo somos realmente, y  en el texto lo que se detecta es cómo nos comportamos frente a quienes nos rodean».
Una vez aclarado esto, concluyen que tampoco existe una letra mejor ni peor a la hora de analizarla. No obstante, «la natural es la más óptima. De hecho, la ideal no es la que se escribe detenidamente y de forma cuidada. Así se enmascara, tiene poco valor. Es un error hacer esto porque el objetivo del análisis grafológico es ver la expresividad del individuo», añade Manuel J. Moreno.





José Bretón, presunto homicida [1]


Escritura característica de un sujeto cuyo perfil actitudinal está en relación con el control de la emotividad. Gestiona sus emociones ejerciendo autodominio a través de una notable racionalidad. Se advierte frialdad. No está afectado (o no lo manifiesta gráficamente), no muestra signos escriturales de hallarse conmovido, emocionado, pudiendo hablarse por tanto de discrepancia (disonancia cognitiva) entre lo que dice y el cómo lo dice; es decir, entre su lenguaje gráfico gestual, no verbal o grafológico y el discurso manifiesto de su escrito.(…) No cede a las presiones con facilidad. Su mente procesa información de manera pausada. Precisa planificar, ejercer control en sus actos  (…) Sabe manejar los tiempos a su conveniencia.




 







Fuente: http: //www.larazon.es/miércoles, 26 diciembre 2012


[1] Su grafismo.
[2] En Argentina se denomina REEDUCACIÔN GRÂFICA:
[3] En Argentina Trazos, grafismo, ductur, hilo gráfico…

domingo, 23 de diciembre de 2012

¿CHARLATANISMO GRAFOLÓGICO?




 Por Jaime Tutusaus.


Hace ya algún tiempo que se vienen dando muchos cursillos sobre "Grafología de la firma". No tenemos nada contra la enseñanza remunerada de la Grafología, pero sí que da la impresión de que ciertos cursillos suenan a "camelo”.
Ciertamente la firma es un elemento auxiliar, para el análisis de la escritura, pero aislada de ésta permite determinar "pocas cosas con certeza. La Grafología de la firma es más bien una cuestión monográfica dentro de la enseñanza de la Grafología.
En los múltiples contactos con personas que podríamos denominar "españoles de a pie" hemos observado que solamente tienen un conocimiento superficial de la Grafología y es al adquirido a través de la televisión. El 95 por ciento de los "encuestados" suelen preguntar entre escépticos e incrédulos: ¿es cierto que con la firma se puede saber cómo es una persona? Evidentemente, no. Se les contesta que es poco lo que se puede determinar y que la Grafología se basa en la escritura habitual del sujeto a base, si es posible, de diversas muestras gráficas, conteniendo como aditamento la firma. En otras palabras, que la determinación de algunos rasgos aislados no constituye un retrato completo.
Lo peor de tales apariciones televisivas es que siempre se trata la firma con tópicos repetidos e interpretaciones falaces y, frecuentemente, se acompaña con firmas de famosos, haciendo grafología a "toro pasado", lo cual es motivo de desprestigio para' la Grafología como ciencia. Más bien parece un "divertimento" o la buena ventura...
A nivel científico, reconocemos la labor hecha por autores tan insignes como Vels y R. Crepy, siendo sus observaciones de interpretaciones valiosísimas para el grafólogo profesional.
Entendemos que una cosa es difundir el conocimiento de la Grafología como ciencia seria y otra cosa es vulgarizar un aspecto de la misma, llamando a engaño a los neófitos sobre las posibilidades del análisis casi mágico de una simple firma.
Exagerando las posibilidades del análisis de la firma y uniéndolo a la superficialidad y al mercantilismo tenemos ya los ingredientes básicos para el charlatanismo. Estamos en una época en la que si no se presentan las cosas con claridad, se puede caer fácilmente en la confusión por una parte, o en el papanatismo por otra.
Los grafólogos italianos, por diversos motivos, no suelen dar una importancia excesiva a la firma y se concentran básicamente en el texto gráfico. Podemos citar, a tal efecto, a Totbidoni, Zanin, Moretti y Marchesan. Sin la firma hacen igualmente una labor extraordinaria, tanto en la elaboración de las bases científicas como en la aplicación práctica de la Grafología. Reconocemos que cuanto proviene de la escuela francesa o alemana sobre la firma constituye una aportación inapreciable, pero hemos de tomar conciencia de sus límites.
Un autor nada sospechoso de tomar una posición partidista, pues es el autor del libro titulado "Cómo conocer a una persona por su firma", Luc Uyttenhove, conocido grafólogo belga también autor de un libro de contenido altamente simbólico y original ("La nouvelle graphologie"), termina su libro sobre la firma con las siguientes consideraciones que debiéramos tomar en cuenta con la máxima seriedad:

"...una firma sola, con ser de por sí muy elocuente, sólo puede ser objeto de una contemplación pasiva; no es más que uno de .los elementos de estudio. La firma precisa de un texto, o sea, líneas escritas, para que se pueda realizar una operación de comparación.
Esta es la razón de que sea esencial la comparación entre las letras de la firma y las del texto y de que sólo ella permita una descripción, que a su vez va a permitir una explicación". "Por lo tanto, se puede añadir que el texto refleja el comportamiento social del escritor. Y esto, por contraste con su firma, que no dice nada de esencial y que no precisa ser leída, puesto que nada añada al cuerpo del texto escrito. Si hay un mensaje, éste no se encuentra más que en el texto. Así que la firma es inútil., al menos en lo que al fondo del acto. Se refiere".
"Los puntos de identidad o de discordancia gráficas entre el texto y la firma explicarán claramente los sentimientos personales del signatario, tanto con respecto a los demás como a él mismo. Quien dice equilibrio, dice unidad de actividad, estabilidad entre impulso y moderación, entre espontaneidad y reserva".
"No pueden el texto escrito y la firma estar, pues, disociados; ellos "conforman" el ambiente gráfico, el campo en que el ser se encuentra en contacto con los estímulos, los atractivos y las aversiones que condicionan su comportamiento. En dos palabras: el texto representa el destino social del escritor y la firma, su destino individual".





Fuente: Bol. 4 1988 La Redacción AGC. Jaime Tutusaus Lóvez.

sábado, 22 de diciembre de 2012

EL CEREBRO por el doctor Daniel Geffner



EL CEREBRO ORGANIZACIÓN Y FUNCIÓN


El cerebro es el órgano que nos hace pensar, sentir, desear y actuar. Es el asiento de múltiples y diferentes acciones tanto conscientes como no conscientes, que nos permite responder a un mundo en continuo cambio y que demanda respuestas rápidas y precisas.
En el libro se considera “cerebroa todo el encéfalo, comprendiendo los dos hemisferios (mitades) cerebrales, el diencéfalo, el tronco encefálico, y el cerebelo.

Una rápida visión anatómica del Cerebro

El encéfalo pesa aproximadamente 1,3 kg y su tamaño es de 1380 centímetros cúbicos. Esta alojado en la cavidad craneal que lo protege, con su cubierta ósea, del medio externo, y está envuelto por unas membranas meníngeas y bañado por liquido cefalorraquídeo. Mediante la abertura del agujero magno, el encéfalo se continúa con la médula espinal, estructura compacta que contiene múltiples circuitos intramedulares y haces de fibras nerviosas ascendentes y descendentes que permiten al cerebro dirigir o supervisar la sensación y acción del resto del cuerpo.



Organización del Cerebro

El cerebro tiene miles de millones de células nerviosas ( neuronas) y al menos el doble de otras células (gliales). Las neuronas son los ladrillos con los que está construido el cerebro y su propiedad más desarrollada es recibir, procesar y transmitir información mediante la emisión de impulsos bio-eléctricos a cientos de otras neuronas.
Esta aparentemente enmarañada red de neuronas se organiza en la corteza cerebral, a nivel microscópico, en varias capas (6) cada una con unas entradas (aferencias) y salidas (eferencias) diferentes, conectando con parte específicas del sistema nervioso. A la organización en capas se superpone una organización modular, que permitiría el tratamiento específico de ciertas informaciones por conjuntos de neuronas (las columnas).
La complejidad de la organización del sistema nervioso humano sigue planteando importantes retos a la ciencia, aunque mucho se ha avanzado en las últimas décadas.
El cerebro tiene dos hemisferios (mitades), unidos por varios puentes, el mayor es el cuerpo calloso con millones de fibras nerviosas que comunican ambos lados.
Cada hemisferio cerebral tiene unos territorios definidos como lóbulos cerebrales, delimitados por grandes surcos (Cisuras). Estos lóbulos son: el frontal, parietal, temporal y occipital.
Hay una diferenciación y complementariedad de funciones entre cada uno de ellos.  A modo esquemático se puede decir que lóbulo Frontal es el encargado de decidir la conducta motora apropiada en cada caso. Cuando
vemos una objeto que nuestro cerebro identifica como peligroso- una serpiente- , la decisión de salir corriendo o quedarnos quietos se efectúa a nivel del lóbulo frontal, interviniendo el sistema de detección de peligros (sistema límbico) cargando de fuerza y emoción a nuestro accionar . Otro ejemplo más cotidiano, pero no menos significativo, se da diariamente cuando colocamos la mano de forma diferente para coger una taza o una cuchara. La manera que la mano actúa en el  plan motor- se define y decide en el lóbulo frontal. En el lóbulo frontal hay una banda de tejido a modo de mapa anatómico de nuestro cuerpo “el homúnculo motor” donde el tamaño de cada segmento corporal es proporcional a la complejidad del movimiento y acción a realizar. Así la mano, los dedos y la cara tienen, en este mapa, una mayor extensión que los hombros o las caderas.
El lóbulo frontal esta muy desarrollado en el ser humano albergando importantes tareas no motoras como la planificación de la conducta , el control de nuestras emociones, el razonamiento y juicio que son funciones complejas no siempre fáciles de analizar en el paciente con ictus. Las áreas responsables de estas habilidades están por delante de las consagradas a la función motora (áreas premotoras y prefrontales)
Para actuar necesitamos información de nuestro entorno y de nuestro propio cuerpo. Así siguiendo con el ejemplo de la taza de café, no podríamos realizar una tarea tan sencilla, si no detectáramos mediante nuestros sentidos el peso de la cucharita que movemos, el tamaño de esta, el mapa de donde esta nuestra mano y el recorrido que debemos realizar.
El lóbulo parietal esta involucrado en el mapa de “donde actuar” integrando la información sensorial interoceptiva (de nuestro cuerpo: los músculos, articulaciones, tendones) y exteroceptiva (del exterior). Se le atribuyen básicamente funciones sensitivas, asociativas, así como de reconocimiento del espacio.
El lóbulo occipital se encarga básicamente de la visión, elabora la información visual aunque esta trasciende a los lóbulos parietales y temporales.
El lóbulo temporal es el asiento de los últimos peldaños de procesamiento auditivo, así como el lugar donde, en su cara medial, asientan importantes estructuras de la memoria (hipocampo), y del sistema emotivo inconsciente (sistema límbico).
Pero los 2 hemisferios cerebrales no hacen lo mismo. En los seres humanos se reconoce una lateralización de funciones. Es decir que la evolución se ha encargado de sacar mayor partido mediante una división del trabajo entre las dos mitades del cerebro (los hemisferios cerebrales). Así para el lenguaje el hemisferio que contribuye en su producción y comprensión es – habitualmente - el hemisferio izquierdo, destacando las siguientes áreas: la porción inferior del lóbulo frontal (área de Broca); la región del lóbulo temporal lateral y superior (área de Wernicke) y las zonas circundantes entre estas áreas.
La mayor parte de la población es diestra, lo que significa que su mano más hábil es la derecha, y el lado izquierdo del cerebro es el que domina dicha mano y la mayoría de aspectos del lenguaje.
Así como el desarrollo de la división de trabajo en la humanidad consiguió enriquecer las artes y la ciencia hasta niveles desconocidos anteriormente este reparto de funciones entre el lado derecho e izquierdo del cerebro habría posibilitado el desarrollo de nuestras más refinadas habilidades intelectuales.
Pero el cerebro pese a dividirse el trabajo entre diversas regiones y hemisferios funciona como una unidad, logrando en tiempo real una acción coordinada y precisa.
Por debajo del manto cortical (córtex cerebral) está la sustancia blanca cerebral por donde cruzan los haces o manojos de fibras nerviosas, cada una con un rumbo y tipo de información diferente. Debajo de esta sustancia blanca se localizan los núcleos grises profundos (ganglios basales) que intervienen en múltiples funciones, especialmente en la conducta motora.
El diencéfalo está, entre y algo por debajo de los 2 hemisferios, formado por el Tálamo y el Hipotálamo. El Tálamo es la estructura que sirve de estación de procesamiento de información sensitiva, motora, e interviene en el nivel de atención y alerta.
El hipotálamo, siguiendo hacia abajo, tiene un rol central en la integración y regulación de las funciones autonómica y hormonal. Las relaciones del diencéfalo hacia arriba con los hemisferios cerebrales y hacia abajo con el tronco del encéfalo lo convierten en la gran puerta de entrada al cerebro.
El troncoencéfalo es asiento de importantes funciones vegetativas que mediante automatismos bien conservados en el curso evolutivo, consiguen reajustar nuestro organismo a las diferentes situaciones. Estos automatismos nos permiten seguir respirando mientras dormimos, o despertarnos preparándonos para la acción cuando un ruido intenso e inesperado rompe el descanso nocturno. Finalizamos nuestro recorrido con el cerebelo que ocupa su posición por detrás y debajo del cerebro. Conectado con el tronco cerebral, y a través de este con el cerebro y la médula espinal se encarga fundamentalmente de la coordinación motora, determinando el ritmo y ajuste perfecto de nuestros movimientos, así como del aprendizaje motor.
El troncoencéfalo se continúa al salir del cráneo (la cabeza) con la médula espinal que transcurre por el canal raquídeo (la columna) y que raramente se afecta en el ictus, por  lo que aquí se acaba nuestro recorrido anatómico.


Los déficit focales- La parálisis de la función

En este apartado intentaremos describir el déficit más frecuente ocasionado por el ictus.
La lesión de una parte del cerebro suele manifestarse con una pérdida de función ó déficit, no siempre tan fácil de reconocer como la parálisis de una extremidad o la alteración del habla .


La PARÁLISIS ó PARESIA: La destrucción de la parte motora del lóbulo frontal (corteza) o sus vías a nivel de la sustancia blanca del hemisferio o del tronco encéfalo, ocasiona una parálisis. El grado de parálisis depende de la localización, tamaño y del grado de destrucción. La hemiparesia o hemiplejía es la parálisis de la mitad del cuerpo que puede afectar en distinto grado a la musculatura de la cara (parálisis facial ), extremidad superior y la extremidad inferior .
Hay que recordar que la vía motora se cruza al otro lado en el tronco del encéfalo.
Así la vía corticospinal -o piramidal- (inicio en la corteza cerebral y que termina en la médula espinal) se cruza a nivel del bulbo (parte inferior del tronco-encefálico).
Por lo que una embolia en el hemisferio izquierdo del cerebro, que afecte a la vía motora, causará una parálisis de las extremidades derechas denominándose a dicho déficit hemiparesia o hemiplejía derecha.
En ocasiones no hay una clara pérdida de fuerza pero si se demuestra torpeza en los movimientos finos de la mano (abrocharse los botones; escribir.)

LA ALTERACIÓN DE LA  SENSIBILIDAD: El déficit neurológico también puede afectar al Lóbulo Parietal y /o las vías sensitivas somáticas, con lo que la persona quedará con una pérdida de la sensibilidad de la mitad opuesta del cuerpo. Las vías sensitivas también se cruzan, es decir cambian de lado, aunque no en los mismos lugares que la vía motora. Así la lesión del lóbulo parietal derecho da una pérdida de sensibilidad en el lado izquierdo del cuerpo hemihipoestesia izquierda en este ejemplo. Y se añade, en ocasiones, la anosognosia en la que el paciente queda postrado por la parálisis de su brazo y pierna izquierda, pero no es consciente de dicho déficit. Esta falta de reconocimiento del déficit puede ser de distinto grado, desde una sutil y transitoria inatención al hemicuerpo afectado hasta la negación del mismo y que puede ser un obstáculo para  una Rehabilitación eficaz.
Si se afecta el lóbulo occipital o la vía visual, es frecuente la pérdida de visión en el lado opuesto: la llamada hemianopsia.


EL TRASTORNO DEL HABLA.

La Afasia: Cuando el lóbulo temporal resulta dañado por el ictus , en el lado izquierdo (dominante) en su área encargada del habla, puede ocasionar una incapacidad para entender el lenguaje hablado (afasia de Wernicke o de comprensión ) aunque, la persona puede decir palabras a buen ritmo pero sin sentido. Si la lesión es a nivel del área motora del lenguaje del lóbulo frontal izquierdo, el paciente puede entender lo que se le dice pero es incapaz de contestar adecuadamente salvo con palabras sueltas o monosílabos. Es un lenguaje pobre y poco fluido.
La audición no se afecta clínicamente por una lesión unilateral del lóbulo temporal.

OTROS SÍNTOMAS Y SIGNOS DE ENFERMEDAD CEREBRAL: Pero no solo hay déficit motores, sensitivos, visuales y del habla por lesiones del cerebro. En ocasiones puede haber una alteración de la conducta, pérdida de la capacidad para leer, o un articulación defectuosa del habla (disartria).
La lesión del Tronco del Encéfalo habitualmente se manifiesta por vértigos acompañados de visión doble, alteración de la marcha, pérdida de la fuerza y/o sensibilidad en una distribución variable.
El daño al cerebelo se suele manifestar como una incoordinación motora también llamada ataxia. El paciente puede tener dificultad para caminar sin ayuda, o para coger objetos, sin encontrarse una alteración de la fuerza o de la sensibilidad. Puede acompañarse de cambios en la voz, vértigo, o quejas visuales no específicas.

OTRAS QUEJAS: La cefalea (dolor de cabeza) puede acompañar o preceder al Ictus. En este caso la intensidad y clínica acompañante permiten diferenciarla del dolor de cabeza ordinario. Puede acompañarse con nauseas y vómitos, y alteración del nivel de conciencia (somnolencia, a estupor y coma). Son más frecuentes, aunque no específicas, en las hemorragias cerebrales.

 

Daniel Geffner especialista médico nació en Argentina en el año 1953. Estudió la Carrera de Medicina en Buenos Aires, siguiendo la tradición familiar --su padre era médico cirujano. En 1978 llega a España  y  después de realizar la residencia en La Fe de Valencia, trabaja como médico de Medicina General en Canarias, entre otros lugares. Una vez aprobó la oposición, se incorpora al equipo de Neurología del Hospital General, Ha sido jefe de la unidad de Neurología del Hospital General de Castellón y presidente del Comité Organizador de la XX reunión anual de la Sociedad Valenciana de Neurología.






Fuente:Capítulo 2: EL CEREBRO ORGANIZACIÓN Y FUNCIÓN
Dr. Daniel Geffner


























El RITMO ESCRITURAL



El RITMO ESCRITURAL
Está ampliamente tratado y por ello vamos a repasar algunos de los enfoques que sobre el tema han ofrecido diversos autores, y es desde luego KLAGES el punto de partida por el cual comenzamos nuestra exploración, porque es él el que inicia este trabajo que constituye un nuevo modelo, en el que se apoyan sus seguidores principalmente Roda WIESER, Robert HEISS e incluso PULVER, SAUDEK o POPHAL, y otros han considerado en sus obras y trabajos.
"El ritmo es la manifestación misma de la vida", dice Ludwing KLAGES, y añade "la propiedad del ritmo es reproducir constantemente, en periodos de tiempo que no son semejantes, formas parecidas, pero donde cada una de ellas no es jamás la reproducción exacta de la precedente", este enfoque es conceptualmente fundamental para la grafología, y en el que se sustenta en gran medida su teoría de la expresión, sí bien este planteamiento resulta de otra manera parcial en la practica del análisis del contexto gráfico, pues no solo la escritura es expresión, sin duda es también proyección, es cultura, es arte y por tanto es un hecho antropológico centrado en la formación y el aprendizaje del modelo propuesto.
La escritura en general, pero la firma en este caso particular que nos ocupa, es un claro exponente de ese "ritmo", y como tal es la manifestación más genuina del sí mismo del autor que firma o escribe.
A pesar de que Klages inicia el camino sumamente interesante de un nuevo modelo de orientación grafológica, y ser él que abre una vía de acceso a lo más profundo de la escritura y por otra parte incidiendo en lo más oculto de la personalidad, propugna una consideración del ritmo estudiando y analizando cuidadosamente los aspectos básicos de: VELOCIDAD, ORGANIZACIÓN y ORIGINALIDAD, aunque nos parece que con ello no consiguió del todo eliminar el factor cultural, introduciendo un sesgo (con una apreciación a menudo subjetiva de la originalidad), ya que resulta algo difícilmente extrapolable, en el tiempo y el espacio, pudiendo variar en función de la latitud o la longitud, así como de la época, lo difícil es en cualquier caso poderlo aceptar y considerar hoy, tal y como lo propugna en su obra.
El ritmo es algo vivo, dinámico, elástico, la ausencia del mismo resulta una muestra en apariencia algo apagada, crispada o blanda, rígida o bien desestructurada.
Se aprecian dos claras posturas ideales, dos formas de conducta que se plasman abiertamente sin lugar a dudas en el conjunto de lo trazado.
Ludwing KLAGES lo simboliza metafóricamente como la dialéctica de dos fuerzas, que se imbrican la una a la otra. Estas fuerzas las personaliza y simboliza mediante la figura de dos dioses griegos:
APOLO <<
>> DIONISIOS
Por APOLO (FEBO APOLO hijo -predilecto- de ZEUS y de LETO / su esposa es PERSEFONE) se entiende en él a un símbolo del rigor, la responsabilidad, la voluntad, la constancia, el autodominio, la disciplina, la prudencia y la RAZÓN, así como una clara victoria sobre la violencia y la ignorancia, es uno de los más bellos símbolos del ASCENSO (el que sube), siendo su sabiduría fruto de una conquista, no algo heredado.
Representa lo caracterológico de la personalidad, lo adquirido y aprendido, aunque su estado límite o exagerado puede llevarle a la rigidez, la frialdad, la crispación o la regularidad excesivas. También lo podemos asociar al CONSCIENTE y desde luego contempla tanto un YO propio de la precisión, como de un SUPERYO de extrema rigidez.
En la psicología de JUNG, aparece como generalmente EXTRAVERTIDO, mental e intuitivo, orientándose claramente hacia el futuro. Sus principales conflictos son: la distancia emocional y la arrogancia. Sus puntos fuertes la capacidad para fijarse metas y conseguirlas, así como el aprecio de la claridad y la forma.
Mientras por otra parte tenemos la figura de DIONISIOS (también llamado BACO, hijo -protegido- de ZEUS y SEMELE / su esposa es ARIADNA), que representa la espontaneidad, la inmoderación, el exceso, la desmesura, el entusiasmo, el delirio, la creación de ilusiones, el deseo amoroso, la ruptura de inhibiciones y de represiones, aunque también la falta de rigor y la irresponsabilidad. Representa lo temperamental, lo innato y constitucional, su estado exagerado nos conduce a la disolución, la sensibilidad extrema (inestabilidad emocional), la inconstancia, la irregularidad, la ausencia de mecanismos de control, a la vez que adolece de disciplina y de dominio de sí.
Simboliza las fuerzas de la disolución de la personalidad, la regresión hacia las formas caóticas, primordiales y la ambivalencia. Es un claro símbolo del DESCENSO (el que baja), él dos veces nacido y la liberación Dionisíaca puede ser espiritualizante o materializante, y un factor netamente evolutivo-involutivo.
Ese descenso a los infiernos (reino de Hades) representa claramente la fuerza de lo INCONSCIENTE.
En la psicología de JUNG resulta extravertido o introvertido, prototipo de la FUNCIÓN SENSACIÓN, orientándose de forma decidida hacia el presente y lo inmediato y la eternidad.
Su área de conflictos se centra en la distorsión de la percepción de sí mismo, la huida hacia el consumo de sustancias (drogas, alcohol) y la baja autoestima. Mientras sus cualidades vienen marcadas por una amplia apreciación de la experiencia sensorial, el amor por la naturaleza y la intensidad pasional.
En cierto modo el conjunto de aspectos contrapuestos entre ambas tendencias nos ofrece una clara distinción de los extremos polares de una misma naturaleza enfrentados:
La RAZÓN
El SENTIMIENTO
La RIGIDEZ
La BLANDURA
La FUERZA
La DEBILIDAD
Lo CONSCIENTE
Lo INCONSCIENTE
La FORMACIÓN
La DEFORMACIÓN
La SOBRIEDAD
La PASIÓN
Ese continuo de tendencias opuestas tiene sin duda un punto básico de inflexión un punto central intermedio e ineludible, un punto de equilibrio fundamental, que nos sitúa psicológicamente al individuo cerca del "justo medio", de esa posición que nos lleva al ser humano ideal, tal vez el superhombre anunciado por NIETZSCHE, para el cual lo Apolíneo implica todo aquello que está aclarado por la luz de la razón que se hace armonía y belleza, algo que se opone a lo Dionisíaco, que para él es lo trágico y lo que hace referencia al exceso y la desmesura pasional y creativa.
Adentrándonos en el RITMO escritural lo podemos establecer como el equilibrio de entre esas dos fuerzas básicas profusamente descritas.
A partir de aquí podemos apreciar tres grandes grupos rítmicos:
A/ RITMO DÉBIL, que surge de la presencia de posiciones Dionisiacas en exceso.
 
B/ RITMO RÍGIDO, cuando son las características Apolíneas las que se manifiestan en demasía.
C/ RITMO FUERTE, que se manifiesta cuando ambas fuerzas se combinan y reparten armónicamente en el contexto gráfico.
Hay escrituras evaluadas por él propio KLAGES como rítmicas, que hoy pueden estar algo por debajo o bien al contrario resultar excesivamente rígidas, en una apreciación actual, por ello resulta interesante escuchar otras voces que nos acerquen al concepto propuesto observando diferentes facetas del mismo fenómeno.
Otros autores han tratado el tema, como por ejemplo Max PULVER, para él el RITMO es "la esencia del ser" o "la cualidad existencial" e incluso añade "podemos hablar de la base biológica del RITMO (el palpitar del corazón, el flujo y reflujo de la sangre en la circulación) etc. Por ello el ritmo se puede poner de relieve en la tonalidad general del grafismo".
Para los autores MULLER-ENSKAT centrándose más en la cuestión, "El RITMO es el nervio vital de la escritura. En él confluyen las causas de la personalidad y todos los diagnósticos parten de él. El elemento primario del ritmo reside en un movimiento elástico que va y viene y que se adapta a las circunstancias, se extiende o se contrae tanto como le es necesario. La elasticidad del trazo, al contrario que la rigidez, es el criterio que permite determinar la adaptación o la falta de adaptación social".
Por otra parte Wilheim MULLER aclara algo más la cuestión señalando "Se puede explicar el RITMO partiendo de la noción de regularidad (Compás). La regularidad es la repetición de movimientos idénticos en un tiempo igualmente idéntico, mientras que el ritmo es la repetición de movimientos más o menos semejantes en tiempos más o menos parecidos, los movimientos de una máquina de vapor o el reloj son regulares, pero los latidos del corazón o las olas del mar son rítmicos. Según estas nociones de ritmo y regularidad, una escritura puede ser vibrante o monótona, espontánea o esquemática (artificiosa??), pulsional o mecánica".

También la idea de RITMO de Roda WIESER, discípula de KLAGES, la podemos seguir según las indicaciones de GUY DELAGE, que hace mención a ésta particular visión de la concepción rítmica, "el RITMO de BASE se estudia principalmente - aunque no exclusivamente - en la zona media de la escritura, y más particularmente en las formas de cohesión, así como en las letras [m, n, u e i]. Este ritmo de base ofrece en sí mismo un valor esencial y fundamental de síntesis en su sola interpretación. Roda WIESER da al ritmo de base, una significación de orden ético: la elasticidad máxima es la abertura hacia el otro en el sentido más amplio y más noble, mientras que los polos extremos de rigidez y relajamiento son al contrario el dominio del egoísmo, el cual puede entrañar en cierto sentido las conductas asociales y delictivas", así pues la carencia de elasticidad del trazo hace tender o propender hacia la trasgresión delictiva. Por otra parte de una forma general, el ritmo es la coherencia de la forma en cierta manera estructurada.
Pero desde luego el estudio más minucioso y detallado nos lo ofrece el grafólogo alemán Robert HEISS, que ha ejercido como profesor de grafología en la universidad de Friburgo, y formado a una amplia generación de colegas germanos. Comienza con una precisa y exhaustiva observación de la grafía, que nos permite tras un cuidadoso análisis determinar los ejes básicos de la definición del escrito en cuestión, lo cual en una segunda fase nos facilita la tarea de aplicar las hipótesis de interpretación adecuadas, para luego contrastar las propias pautas gráficas de la firma con las del resto de la grafía.
Nos hace observar que: "Por RITMO, entendemos un flujo y reflujo que se repite a intervalos más o menos regulares, sin que todas las veces se excluyan las desigualdades y las irregularidades", y además añade "el RITMO es ante todo un hecho del MOVIMIENTO, pero la escritura no es solamente un movimiento, también es una FORMA, y no importa que el movimiento rítmico no sea apto para salvaguardar la forma".
Estas apreciaciones, nos permiten elucidar los aspectos principales del ritmo en la firma y desde luego las relaciones entre dos o más firmas aisladas.
Siguiendo este procedimiento de trabajo, pero adaptándolo a nuestra mentalidad y época, y siguiendo las pautas ya desarrolladas por numerosos autores, hemos elaborado nuestro propio modelo de trabajo.
Este estudio se establece siguiendo un perfil sencillo de rasgos gráficos, dentro de una estructura de lectura horizontal y vertical, a la vez que con otra orientación correlacionada con otros ámbitos de trabajo.
Las tres franjas principales hacen referencia a los tres componentes fundamentales del ritmo descritos por HEISS.
MOVIMIENTO + ESPACIO + FORMA
 
El estudio y la evaluación de cada uno de estos componentes, implica un análisis pormenorizado de los distintos géneros gráficos y especies que los comprenden y articulan, ofreciendo una visión global valorada para cada uno de esos aspectos.
Vamos ha hacer un repaso a nuestro esquema básico de trabajo, para luego apreciar su aplicación práctica sobre algunos casos reales.
En el estudio del MOVIMIENTO tenemos cinco variables, de sobra conocidas por todos, aunque aquí matizaremos las precisiones útiles para que sea un adecuado y riguroso instrumento de evaluación.
Medir la velocidad ha sido hasta hace poco uno de los grandes retos de la grafología científica, y nosotros hemos elaborado nuestro propio sistema de trabajo a partir de las aportaciones de SAUDEK > SINGER > HILLINGER > WINTLE, y así establecimos un criterio de valoración en letras por minuto, que si bien no es extrapolable a la firma sí es aplicable en parte, y de esos criterios destacaría aquí aquellos específicamente válidos, sobre todo los que hacen mención a la VELOCIDAD y luego no se contemplan en el MOVIMIENTO. Concernientes expresamente a la velocidad tenemos:

LENTITUD >> MESURA
RAPIDEZ
Apretada (Entre letras)
Extendida (Entre letras)
Estrecha (De letras)
Ancha (De letras)
Cerrada (De óvalos)
Abierta (De óvalos)
Presión Firme > Pesada
Presión Fluida > Ligera
Complicada
Simplificada
Barras y Puntos a la Izquierda
Barras y Puntos a la Derecha
Así pues, una escritura será rápida cuando más elementos tenga en la columna derecha y pausada o menos rápida cuando los valores se centren en la columna izquierda. Por eso los rasgos contemplados son:
1/ la VELOCIDAD (ya comentada) que afecta sin duda al ritmo de movimiento
.
2/ Una clara PROGRESIÓN
3/ Un tipo de cohesión AGRUPADA > LIGADA
4/ Un grado aceptable de INCLINACIÓN, bien que sea RECTA o ligeramente INCLINADA (aproximadamente entre 90º a 100º).
5/ Así como una fuerte SOLTURA y fluidez en lo trazado.
Cómo podemos apreciar en la tabla de valoración de los elementos, el estudio detallado de los cinco rasgos definidos nos permite poner en evidencia el RITMO DE MOVIMIENTO, y sobre todo significar que no se trata únicamente de la VELOCIDAD como postulaba KLAGES, sí no más bien de la manera en que se produce o comporta concretamente esa velocidad, ¿cuál es la propuesta que hace el escritor?, ¿Cómo y en que forma avanza el grafísmo por la superficie del papel?, esa es la cuestión.
El segundo estadio de nuestra observación se refiere claramente al ESPACIO, y dentro de el escrito lo ocupa, su distribución, no solo entre sí sino también con respecto al espacio de que dispone, por ello los rasgos a analizar son:
6/ Una PROPORCIÓN, adecuada en el repartimiento entre las 3 zonas (superior, media e inferior).

7/ El estudio de la BASE de la onda gráfica, su sinuosidad o rigidez.
8/ La DIRECCIÓN de la base de la firma respecto a sus grados de ASCENSO o DESCENSO.
 
9/ La UBICACIÓN de izquierda a derecha (horizontal), así como
10/ La SITUACIÓN en la proximidad arriba > abajo (vertical), las dos últimas cuestiones relacionadas con respecto al texto de la carta
Nos facilita la lectura de cómo llega a comportarse la ocupación del espacio y por ello es una de las claves para determinar el RITMO de ESPACIO.
Finalmente nos ocupamos de la FORMA, o más concretamente del RITMO de FORMA, que resulta en el fondo la manera de entender, asimilar y evolucionar sobre el modelo caligráfico aprendido, mostrando el grado de perfeccionamiento que esto representa, por ello aquí incidimos en los aspectos:
11/ La relación entre el ÁNGULO y la CURVA
12/ El grado de ARTIFICIOSIDAD o el SERVILISMO, enfrentado a la PERSONALIZACIÓN.
13/ La PASTOSIDAD del trazo o el trazado NETO.
14/ El nivel de LEGIBILIDAD o ILEGIBILIDAD.
15/ Y desde luego, la apreciación en la dinámica de lo RELAJADO o bien CRISPADO contrapuesto a lo TENSO.
Con una correcta apreciación de estos aspectos gráficos la calidad de la forma nos facilita una comprensión adecuada del ritmo de estructuración FORMAL.
Para una correcta y más amplia valoración, tenemos además de los
quince rasgos propuestos, la aportación de varios aspectos
CORRELACIONALES, centrados en:  La valoración del TRAZO siguiendo las pautas de Walter  HEGAR
La consideración de los aspectos ZONALES
Y un estudio detallado aplicado sobre la RUBRICA.

 Fuente: Germán BELDA  GRAFOSTUDIUM- Gabinete Técnico Pericial
PERICIAS CALIGRAFICAS  El Portal de los Peritos
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